3. Armas, foros y diplomas
Las explicaciones y la conformación de comunidades adquieren mayor profundidad cuando se observan las tipologías de los contenidos de las conexiones que registraron los servicios de inteligencia. Estos tipos, que emergen de la literalidad y el contexto de lo documentado en las fuentes primarias, precisan las cuestiones más inquietantes para la inteligencia militar durante el ejercicio de sus funciones frente al despliegue del mundo del enemigo.
«(…) la URSS por intermedio de su Embajada, está concediendo viajes por su cuenta (…), con el objeto de llevar a cabo de adoctrinamiento con lapsos aproximados de 3, 5, 8 meses y un año. Hace aproximadamente dos meses regreso (sic) un elemento de profesión zapatero del POLICARPA, quién actualmente es profesor de materias concernientes a ideología comunista. Adelantando este curso en el exterior, se encuentra [un militante] quién ejercía la profesión de peluquero en el barrio»
- Departamento E-2. Informaciones para la Junta de Inteligencia Nacional, mayo de 1969.
Dentro de los 15 tipos de conexiones encontradas, las de mayor incidencia son:
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Los intercambios militares. La instrucción militar, la obtención de armamento, la financiación, el apoyo simbólico a la causa guerrillera, etc., articularon con más vigor al enemigo interno con sus pares internacionales en el espectro de la lucha armada. Ejemplo de ello fueron las relaciones del Ejército de Liberación Nacional (ELN) y el M-19 con Cuba, pero también la participación directa de extranjeros en la confrontación armada en Colombia y de colombianos en otros países de América Latina.
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Los intercambios en educación. Para los militares, un componente importante del mundo del enemigo fue su infraestructura para la educación y formación, mucho más allá de la lucha armada. Por ello, interesaron en la vinculación de colombianos y extranjeros en procesos de enseñanza y aprendizaje tanto de la doctrina revolucionaria como de conocimientos dirigidos a la profesionalización. Así, estudiantes colombianos que eran beneficiarios de cursos en la URSS fueron considerados como sospechosos de ser subversivos.
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Los intercambios a partir de eventos. La participación de los “revolucionarios criollos” en eventos con asistencia u organizados por sus colegas de otros países, suscitó la atención de la inteligencia. En estos encuentros, que tenían diversas temáticas, los militares procuraron no solo rastrear y especificar a los participantes colombianos, sino también los tópicos de debate que se relacionaban con Colombia y su entorno más inmediato.